Por CLAUDIA DE LA ESPRIELLA
/ Especial para CIUDAD PAZ
La incultura de la corrupción y la perversidad va a salir a marchar el primero de abril. Cinismo y maldad reunidos en las calles en un día que será luctuoso para la verdadera conciencia ciudadana de Colombia. * * * Sin querer ofender a mis amigos uribistas, la verdad es que un movimiento ciudadano que va a marchar para protestar por la corrupción no puede aceptar que un delincuente confeso, condenado por narcotráfico y sicariato, como lo es Popeye, se adhiera públicamente a dicha marcha. Si eso no les parece altamente peligroso y cuestionable es que su sentido crítico y político está muy mal. Ese sólo hecho bastaría para que muchos repudien la movilización. * * *
Curiosa, por decir lo menos, la moral de Ordoñez. Considera un delito execrable el homosexualismo, pero le parece de lo más normal y loable que un narcotraficante y sicario engrose las filas de una marcha contra la corrupción. * * * En un país como el nuestro es comprensible que Uribe se atreva a organizar una marcha contra la corrupción, pues ésta es la muestra clara de que se está en un Estado fallido. Eso nos debe aterrar porque querría decir que la gente de bien está acorralada y acobardada por los delicuentes. No se debe permitir que la sociedad siga inerme frente a tamaño despropósito. Es hora de luchar contra la impunidad de esos falsos colombianos de ‘bien’. * * * Me encanta soñar despierta con un mundo mejor, hecho para los seres humanos que luchan por una sociedad verdaderamente incluyente. * * * Es preocupante darse cuenta que la juventud de todo el mundo desconoce por completo el entorno de sus respectivos países. La educación debe dar un vuelco total para que se sepa, por lo menos, la historia de nuestra realidad y no se crea que surgimos por generación espontánea. Somos la suma de las virtudes y de los errores de los que nos precedieron. * * * Eduardo Verano de la Rosa es un político serio, de esos que se ven poco, pues es un hombre honrado y comprometido con cambios esenciales en la política colombiana. Su análisis crítico es certero y señala vicios de la democracia en nuestro país que son altamente preocupantes. * * * Con todo respeto creo que el crimen de Yuliana no es un feminicidio sino un infanticidio. Lo cual es mucho más grave, pues es atentar contra un ser humano que, en razón de su edad psicológica y física, está aún más impedido para reaccionar que una mujer hecha y derecha. Hay que recordar que el abuso de Rafael Uribe Noguera fue posible precisamente por tratarse de una menor de edad, incapaz de medir el peligro en que se hallaba y de reaccionar ante tanta agresión. Igual si hubiera sido un varón de esa edad tampoco hubiera estado en capacidad de reaccionar. * * * Condenado Rafael Uribe Noguera. Bueno. Pero, y sus parientes encubridores y cómplices, ¿cómo quedan? No basta con no dejarlos salir del pais, hay que llevarlos a prisión y condenarlos. * * * Urge enriquecer el debate alrededor del concepto de cultura y dejar de pensar que todo es cultura.Cultura es sólo eso cambia el entorno para convertirnos en una mejor sociedad. Cuando una sociedad entra por el aro de ciertas modas mediáticas como los realities y otras manifestaciones lights y pueriles no está creando cultura está involucionando mentalmente y se nos aleja de un crecimiento espiritual indispensable para ser una sociedad más justa, ética e incluyente en el verdadero sentido de esa palabra.